Como se explica por el Dr. Umaru Paté de la Universidad de Maiduguri, es importante comprender que en un lugar donde diversas personas se encuentran, un choque cultural se produce sobre todo como resultado de contactos sociales y geográficas.

Según el Rev. Kukah Mateo, el problema de las sociedades plurales es la multiplicidad de identidades, la mayoría de los cuales tienden a convertirse en peligrosas divisiones de la violencia o la injusticia.

Estos incluyen la religión, región, etnia, género, afiliación política, la comunidad y la asociación social.

En Nigeria, estamos bastante familiarizados con el conflicto. Entre 1967 y 1970, hubo una destructiva guerra civil en el país. Lo largo de los años, ha habido varios casos de intercambios intracomunitarios y los conflictos entre grupos étnicos de diferentes tipos y dimensiones.

Esos conflictos van desde religiosas, étnicas, el trabajo, la tierra a las cuestiones políticas. Ejemplos de ello son la crisis religiosa de Kaduna, un enfrentamiento similar en el estado de Plateau, que dio lugar a la declaración de estado de emergencia en 2004, el tiv-Jukun entre enfrentamiento étnico, el Delta del Níger-la sublevación, el choque Maiduguri religiosa en 2006 y muchos más.

Esta situación en el país en lo que respecta a la práctica de la democracia es preocupación, es bastante complicada. Un buen aspecto en estos conflictos que han asolado el país desde la independencia se demuestra que la mayoría de ellos se produjeron como consecuencia de la denegación de derechos por parte de algunos dirigentes o la incapacidad de tolerar la religión de otras personas o prácticas culturales.